Las calles de Gandia se convertirán en un improvisado escenario en el que se recrearán dos imaginarios cortejos del Sol y de la Luna. Con una estética árabe de fantasía y a través del teatro y la danza, Maracaibo ofrecerá a los asistentes un lenguaje poético y festivo repleto de sugerentes imágenes, en las que los actores realizan diferentes acciones y coreografías con elementos como cintas, estructuras escenográficas, esculturas móviles, música y efectos visuales pirotécnicos.

Un homenaje a Al-Andalus, unas tierras, unas gentes y una filosofía que cristalizó en una alegría de vivir, en una exaltación de la sensualidad y los goces terrenos como vehículo hacia las fuerzas de lo sagrado y la armonía del cosmos.